
Lo cierto es que con esta segunda miniserie sí que le he empezado a coger cariño a otros personajes que no sean Brit (que, para mí, era el más interesante al principio y aún sigue siéndolo) pero la idea del Chupacabras (un superhéroe que lucha contra su adicción a la bebida), la de Best Tiger (un personaje de esos con aire de chulo, pero que en manos de Hester puede llegar a ser uno de los personajes buenos e interesantes), la de desarrollar más a Donald… son buenas decisiones que aportan mucho más a la serie. Por cierto, lo del hijo de Brit también me parece una buena idea, por fin vemos que se hace algo lógico con el hijo de un superhéroe en los cómics: problemas reales con los que hacer más humanos a los personajes y que estos sean más accesibles para el público me parece una idea lógica que se debería aplicar más a menudo.